Cheesecake

Para empezar, ¿por qué no probás esta versión saludable de nuestro postre favorito? Un increíble cheesecake vegano. Porque cuidar a los demás no significa que nos privemos de nuestras comidas preferidas.

Crédito: @lacomisionvegana

Ingredientes

Para la base:

• 50 g maní
• 3 dátiles remojados descarozados
• 1 cdita de agua

Para el “queso”:

• 100 g de castañas de cajú hidratadas
• Agua c/n
• 2 cdas de azúcar
• Jugo de 1/2 limón
• 1 cdita polvo de agar agar + 1 cda agua

Para el topping:

• 2 cdas mermelada a elección + 1 cda agua
• 1/2 cdita agar agar + 1 cda agua

Método de preparación

Base cheesecake

1. Por un lado, procesar el maní en licuadora hasta lograr una textura de «queso rallado». Si quedan pedacitos de maní más grandes se los puede dejar tal como están para aportar crocancia. Por otro lado, descarozar los dátiles que fueron remojados en agua caliente para ablandarlos. Cortarlos en pedacitos pequeños.
2. Unir los pedacitos de dátiles y el maní procesado en un bowl, integrando todo con las manos. Llevarlos a un recipiente pequeño. Puede ser un molde de torta de 8 a 10 cm de diámetro. Aplastar con los dedos logrando una base uniforme.

Queso de cajú

1. Llevar el cajú a la licuadora descartando el agua de hidratación. Agregarle el jugo de limón, las cucharadas de azúcar y el agua igualando el nivel de capacidad que ocupan las castañas. En un pequeño recipiente aparte mezclar 1 cucharadita de polvo de agar agar con 1 cucharada de agua, formando una textura de puré de manzana. Sumarle esa mezcla a la licuadora y procesar todo junto durante 1 minuto hasta lograr una salsa espesa y uniforme.
2. Llevar esa mezcla a fuego medio revolviendo lenta y constantemente el fondo para que no se pegue, durante 3 minutos. La mezcla que antes era una salsa bastante líquida, ahora tiene textura de sopa espesa o puré líquido. Apagar el fuego y verter la preparación sobre la base de maní y dátiles, dejando reposar a temperatura ambiente.

Topping de mermelada

1. Mientras se espera que enfríe el cheese, hay dos opciones: o verter unas cucharadas de mermelada frutal sobre la preparación una vez fría, o hacer una especie de gelatina con esa mermelada para que quede uniforme con la base y el queso. Para la segunda opción lo que se debe hacer es diluir en un recipiente la mermelada con un poco de agua hasta que quede una textura más líquida. Luego, agregar media cucharadita de agar agar previamente mezclada con una cucharada de agua. Al igual que con el queso de cajú, llevar la mezcla a fuego medio/alto revolviendo lenta y constantemente el fondo hasta que hierva. Dejar hervir 1 minuto y apagar el fuego. Una vez tibia la preparación, verterla sobre el queso de cajú que ya formó una textura más sólida. Decorar con fruta. Dejar enfriar la torta durante unos minutos y llevar a heladera durante 4 horas. Desmoldar. ¡Listo! A disfrutar.